Me encantó mi estancia en Can Serra 1786. Fui a relajarme y disfrutar de la tranquilidad del campo. La insonorización del lugar fue excelente, me ayudó a desconectar completamente del bullicio de la ciudad. La calidad de los alimentos ofrecidos en los desayunos y cenas fue excelente. Además, la habitación era espaciosa y tenía una temperatura perfecta, especialmente me encantó disfrutar de la temperatura cálida en el suelo. La amabilidad de los dueños hizo que mi estancia fuera aún más agradable.

Lo recomiendo.

El alojamiento está situado en medio del campo, rodeado de un hermoso paisaje verde. Se puede disfrutar de la tranquilidad y relajarse en las hamacas del jardín. Además, ofrecen bicicletas para explorar los caminos de los alrededores. Los desayunos y las cenas son deliciosos, con productos frescos y caseros.

Puede resultar complicado llegar por la noche debido a la falta de iluminación y la dificultad para encontrar la masía en medio del campo.

Mi pareja y yo pasamos una noche en Can Serra 1786 y quedamos prendados del lugar. La casa está tremendamente cuidada y el paisaje que la rodea es excepcional. Todo está cuidado al mínimo detalle, decorado sencillo pero con mucho gusto. El desayuno variado y con productos locales, abundantey delicioso, servido en un entorno inigualable nos encantó. Además, la dueña, Laia, ofrece cenas con productos cultivados en su huerto y de proximidad, lo que convierte la experiencia en algo maravilloso y terrenal. Otro detalle que nos encantó fue poder ir en bici por la vía verde el Carrilet hasta Sant Feliu de Guixols, una ruta fantástica.

Recomendaría este lugar.

La ubicación de este alojamiento es realmente maravillosa, rodeado de campo y con acceso a hermosos caminos para pasear en bicicleta. Además, la casa está muy bien cuidada y decorada con mucho gusto. En cuanto al desayuno, se sirven productos locales y deliciosos, y la cena también es altamente recomendada. Por si fuera poco, cuentan con hamacas para relajarse y disfrutar del entorno.

Quizás el único inconveniente es que algunos huéspedes señalaron que el desayuno puede resultar un poco escaso en cantidad, pero esto se soluciona fácilmente solicitando más porción.

El lugar es sorprendente, perfecto para escaparse del ruido de la ciudad. Además, la ubicación es excepcional, cerca de la carretera pero lo suficientemente apartado para disfrutar de la tranquilidad del campo. El desayuno es una delicia, con productos de la tierra de gran calidad. se destaca el precioso jardín en el que se pueden disfrutar de hermosas puestas de sol.

La falta de personal puede ocasionar algunos retrasos en el check-out.

Pasamos una noche en Can Serra 1786 Villa con mi pareja y nos quedamos encantados con el lugar. La atención fue estupenda y disfrutamos de productos de la tierra deliciosos, tanto en la cena como en el desayuno en su agradable terraza. Laia fue muy amable con nosotros y nos prestó bicicletas para hacer una excursión por la zona. ¡Muy recomendable!

No pude encontrar ningún fallo en nuestra estancia. 😊

Disfrutamos de cada detalle y la paz que ofrecía Can Serrà. Laia nos hizo sentir como en casa, ¡mejor todavía! Pudimos escoger una cena vegetariana, y nos prepararon unos platos deliciosos que venían directamente del huerto. El desayuno también fue una delicia, con productos ecológicos. La habitación era preciosa, con una cama muy cómoda. Nos costó irnos, pero pudimos desconectar completamente. ¡Estamos deseando volver! En general, nos encantó nuestra estancia en Can Serrà 1786.

Me encantó la ubicación del hotel en medio de la naturaleza y con unas vistas impresionantes. La conexión con la naturaleza era increíble y pude disfrutar de largos paseos por los alrededores. Además, el hecho de estar aislado del ruido de la carretera me permitió descansar y relajarme por completo.

Por otro lado, la insonorización de las habitaciones era bastante deficiente y se podía escuchar a otros huéspedes. observé que en la ventana de la ducha había nombres de otros huéspedes pintados con el vapor del agua, lo cual me pareció descuidado.

La ubicación de esta masía en las afueras, rodeada de campo, ofrece un ambiente tranquilo y relajado para desconectar de la ciudad. La habitación es espaciosa y silenciosa, perfecta para descansar. Además, el desayuno es abundante y delicioso, con productos locales y de calidad. se destaca el servicio amable y la posibilidad de cena con productos cultivados en su propio huerto.

El acceso puede ser complicado de noche, ya que la carretera y la visibilidad pueden ser difíciles.

Disfrutamos mucho de nuestra estancia en Can Serra 1786 Villa. Laia nos hizo sentir como en casa y nos sorprendió gratamente con la deliciosa cena vegetariana preparada con productos frescos del huerto. El desayuno también fue maravilloso, con una variedad de productos ecológicos. Además, la habitación era preciosa y muy acogedora. Sin duda, volveremos pronto a este lugar maravilloso.

el lugar es maravilloso y la casa fantástica, Jaume y su mujer son encantadores y siempre están atentos a cada detalle. El desayuno es genial, tanto en calidad como en cantidad, y se amoldan a las preferencias del huésped. Nos dieron unas referencias fantásticas para comer y cenar por la zona. Muy recomendable para una escapada y poder desconectar.

falta una piscina para refrescarse en verano, aunque teniendo el mar cerca no es imprescindible.

Can Serra es el lugar perfecto para escapar del bullicio de la ciudad. La casa está rodeada de naturaleza y ofrece la tranquilidad que tanto deseamos. Las habitaciones son espaciosas, con una cuidada decoración y una temperatura agradable. Además, la hospitalidad de los dueños y la calidad de los alimentos, tanto en los desayunos como en la cena, hacen de la estancia una experiencia inolvidable. podemos disfrutar de paseos en bicicleta por los hermosos caminos de los alrededores.

Sería deseable tener más información sobre los platos de la cena, especialmente si tenemos preferencias alimentarias o alergias.

Disfrutamos de una atención estupenda y productos buenísimos de la tierra tanto en la cena como en el desayuno. La limpieza del hotel era impecable y todas las instalaciones estaban en perfecto estado. Además, contábamos con la comodidad del estacionamiento y pudimos disfrutar de una ubicación tranquila y relajante. El personal del hotel fue muy amable y servicial en todo momento.

No se me ocurre nada.